El mundo de las emociones es sumamente importante para cualquier persona, pero mucho más cuando hablamos de Personas Altamente Sensibles (PAS). Para ellas las emociones suponen en muchas ocasiones subirse a una montaña rusa de vivencias en cortos periodos de tiempo. Lo cual, a veces, puede llegar a asustar. Personas Altamente Sensibles y Emociones.
Personas Altamente Sensibles y Emociones
Concepto de Emociones
Una emoción es una reacción afectiva a un estimulo más o menos espontánea de duración corta y gran intensidad.
En los años 60 Paul Ekman, investigó si las expresiones y los gestos de las emociones eran universales o específicos de una cultura y demostró que las expresiones faciales de las emociones básicas son universales.
Las expresiones de alegría, tristeza, ira, sorpresa, asco y miedo las clasificó como universales, independientemente de la sociedad o la cultura a la que se pertenezca.
Dicho todo esto, podemos obrservar dentro de las emociones una serie de características que las definen y que a su vez las diferencian muy claramente de los «sentimientos», como son:
Las emociones por tanto se caracterizan por ser aquellas que sentimos de manera innata e inconsciente, que tienen una corta duración, y que a su vez, no se necesita de una toma de conciencia para ser experimentadas. Las emociones llegan a nosotrxs de una manera espontánea, y así las expresamos, sin necesidad de que sufran un proceso interno de integración ni crecimiento.
Las emociones y las PAS
Las Personas Altamente Sensibles (PAS) en ocasiones necesitan anestesiar las emociones de una forma casi total. Pensemos que las PAS «sienten» exponencialmente esas emociones debido a que sus filtros son mucho más delgados y su receptividad más elevada. A su vez, sentir emociones es a veces un «problema» para las personas con alta sensibilidad, porque el simple hecho de sentir ya puede llegar a asustarles. Es uno más de sus enemigos. Una sencilla emoción de alegría y lo que significa física y mentalmente para una PAS puede llegar a incomodarles sólo por sentir esa felicidad.
Esto hace que en ocasiones, las PAS anulen todo tipo de emociones, tanto de forma consciente como inconscientemente. No sentir emociones y evitarlas es una de las soluciones más rápidas y sencillas para anestesiar por dentro esa turbulencia incontrolada se sensaciones que no sabemos limitar.
Por otro lado, que las emociones sean fácilmente observables por el exterior supone en muchas ocasiones otro elemento estresor para las PAS, que no desean ser descubiertas en esa alta sensibilidad.
Las emociones poseen unos componentes conductuales particulares, que son la manera en que éstas se muestran externamente. Son en cierta medida controlables, basados en el aprendizaje familiar y cultural de cada grupo:
- Expresiones faciales.
- Acciones y gestos.
- Distancia entre personas.
- Componentes no lingüísticos de la expresión verbal (comunicación no verbal).
Los otros componentes de las emociones son fisiológicos e involuntarios, iguales para todos: Temblor, sudación, sonrojarse, palpitaciones, aumento del tamaño de la pupila…
Cuando las PAS advierten que van a sentir ciertas emociones por los avisos que les da su cuerpo desde el punto de vista fisiológico, ya comienzan a sentir miedo por «sentir» (perdón por la redundancia sentimental) y se ven subidos en una montaña rusa difícil de controlar.
Haber crecido en un entorno donde las emociones sean bien recibidas y donde nos hayan enseñado a gestionarlas de la mejor manera posible, es un elemento muy positivo para que los PAS adultos sepan disfrutar y vivir sus emociones de la manera más real posible. Pero, ¿qué ocurre si durante mi infancia nadie me enseñó a recibir mis emociones de una manera adecuada? ¿si las ocultaba por miedo al «qué dirán»? No te preocupes, no significa que ya no puedas hacer nada. Al contrario, tienes un mundo de emociones maravilloso ante ti para aprender y disfrutar con ello y con ellas.
Las PAS son personas sumamente especiales, en muchos aspectos. Tienen una sensibilidad y una manera de ver la realidad que lxs rodea muy diferente a la del resto. ¿Imaginas entonces la cantidad de emociones que puede disfrutar una PAS? Las emociones ayudan a tu corazón a seguir latiendo con la fuerza que da vivir, y sentir la vida. Debemos aprender a gestionarlas de la manera más correcta, para que cada sentir emocional sea una suma en nuestro crecimiento personal y nos ayude a seguir evolucionando.
Las Personas Altamente Sensibles tienen una relación muy directa con las emociones. Sin duda, son las que de una manera más verdadera pueden llegar a vivirlas, y por tanto, a aprovecharlas dentro de ellxs mismxs.
Emociones positivas y negativas
Es cierto que existen emociones que determinamos como positivas y otras a las que llamamos negativas. Pero no por esto debemos evitar o huir de las segundas. Las emociones deben concatenarse para que todas en su conjunto tengan un sentido. No debemos tener miedo a las emociones que nos generen ciertos acontecimientos. El miedo o la tristeza son tan necesarios como la alegría o la sorpresa (una de las emociones universales que algunos expertos más tarde incluyeron, así como la vergüenza).
Recientes estudios desarrollados por científicos de la Universidad de Glasgow reducen las emociones básicas a 4 argumentado que el miedo y la sorpresa y la ira y el asco comparten parecidas expresiones faciales en las primeras etapas de la emoción
Lo importante es saber gestionarlos y no anclarnos en ellos. No debemos permanecer en las emociones de manera inamovible. Debemos respetar su fugacidad y su corta duración. No abrazar las emociones para quedarnos con ellas. Abrazarlas para sentirlas y agradecer haberlas sentido, en su plenitud y al máximo. Las Personas Altamente Sensibles y emociones pueden ser un gran equipo.
Para disfrutar de lo que es ser una Persona Altamente Sensible, debemos ser conscientes de vivir estas emociones, y no tenerles miedo. Si hemos permanecido mucho tiempo evitando «sentir» posiblemente debamos empezar un trabajo de «re-aprendizaje» emocional, dándole de nuevo la bienvenida a esas pequeñas/grandes sensaciones. No debe ser un camino rápido, si no consciente y seguro.
Ser PAS es maravilloso, y todo lo que podemos llegar a vivir y sentir con ello, mucho más. Emociónate, y llena tu vida con ello.
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Eva Perea,
Coach experta en alta sensibilidad
Terapeuta de Pareja | Sexóloga
Educadora en disciplina positiva para Familias
Fundadora y Directora de Terapia y Emociones
